“Creemos que las tareas pedagógicas con niños y niñas
enmarcadas en un trabajo barrial más amplio con verdaderas intenciones
de transformar la realidad es una compleja tarea política en sí misma
y no una excusa para acercarnos a su familia para ”liberarla” o “concientizarla”.
Redefiniciones conceptuales y metodológicas del Taller Infantil Juanito Laguna. Julio, 2006
¿QUÉ ES?
Es un lugar de encuentro entre chicos, chicas y grandes, entre diferentes saberes, sentimientos, intereses y experiencias. Es un espacio de producción colectiva no sólo en lo educativo sino también en la recreación.
Es un espacio para reírnos, de contención, de aprendizaje, de crecimiento. Nos juntamos todos los sábados de 14 a 19 hs en la biblioteca Juanito Laguna, en Villa Arguello.
Juanito Laguna - personaje de la obra de Berni
¿POR QUÉ? ¿PARA QUÉ?
Porque tenemos ganas, para crear nuevos espacios con otras formas de relacionarnos, nuevos lazos, nuevos valores, posibilidades. Para problematizar la realidad, para reconocernos todos y todas como sujetos/as, para desnaturalizar y cuestionar “las verdades”.
Fundamentalmente, porque pensamos que los y las chicos tienen cosas para decir acerca de esto, de cómo ven ellas y ellos la realidad, qué cosas quieren cambiar; porque queremos escuchar sus voces y aprender de ellas y ellos también. Para romper con la mirada adultocéntrica que el sistema nos impone y pensar cómo incluir a los niños y las niñas en un proyecto de cambio social.
¿CON QUIÉNES?
Con los y las pibes del barrio, con los y las talleristas. Con quien tenga ganas de construir un mundo más lindo, más alegre, menos injusto. Con los y las cumpas del MTD. Con los y las vecinas del barrio.
¿CÓMO?
A partir del debate y la planificación de actividades, semanalmente, con continuidad. Con talleres en los que discutimos, pensamos y creamos a partir de temáticas cotidianas que queremos problematizar, de cosas que nos suceden (a chicas, chicos y grandes). Talleres en los que leemos, escribimos, pensamos, discutimos, creamos en función de una tarea colectiva que hacemos con determinados fines. Muchas veces trabajamos en pequeños grupos (los y las chicas tienen entre 4 y 12 años), pensando algunas modificaciones en la propuesta en función de cada uno, y después hacemos plenarios en los que cada grupo muestra/cuenta lo que ha realizado.
Con alegrías y tristezas, con pifiadas. Con juegos. Sistematizando (poco) lo que hacemos. Poniendo en juego las herramientas que tenemos y otras que vamos inventando en el camino. Intentando no reproducir las estructuras que nos atraviesan: las jerarquías, la discriminación, las imposiciones de visiones de mundo… Repensando las propuestas en función de las crónicas que realizamos de cada encuentro, viendo qué salió bien y qué no, qué nos falta, qué intereses tienen los y las pibas, qué tienen ganas de hacer y contar, qué problemáticas los atraviesan más de cerca, cuáles a nosotros/as y también aportando cuestiones nuevas que nos ayuden a pensar y construir posibilidades. Generando espacios de confianza para que podamos hablar libremente.
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