TyM es una organización territorial que lleva 4 años trabajando con niños y adolescentes a partir de talleres de educación y recreación en distintos barrios.
Algunos de ellos son: Malvinas, queda en calle 146 y 39 y es un barrio formado por familias, en su mayoría tobas, provenientes del Chaco. Allí en el barrio, compartimos nuestros talleres con trabajadores y trabajadoras del Movimiento de Desocupados de La Plata y con los chicos y las chicas del barrio.
Gorina es un barrio que queda en calle 138 y 481. Allí trabajamos junto al MUP (Movimiento de Unidad Popular) en la plaza del barrio, lugar donde nos encontramos con los chicos y las chicas.
Foto: juego y recreación en Gorina
También estamos en Futuro y en Altos de San Lorenzo.
Realizamos talleres infantiles, de cumbia, audiovisual y uno de murga con niños y jóvenes.
¿POR QUÉ HACEMOS LO QUE HACEMOS?
Porque son los sectores populares los que más sufren las condiciones de opresión, no sólo ideológicas sino también materiales, culturales y sociales. Por lo tanto, reforzamos nuestra convicción -que se expresa en un plano tanto personal como colectivo- de estar junto a ellos.
Con respecto a nuestra práctica, concluimos en que no queremos hacer un mero asistencialismo, ya que éste:
1) es incongruente con nuestro proyecto político, porque no queremos “alivianar” los problemas sociales sino erradicarlos de raíz. El asistencialismo es una característica del Estado benefactor y paternalista, que quiere conservar el sistema que tanto repudiamos, el cual está basado en la explotación del hombre por el hombre y en valores como el individualismo.
2) creemos que implica discriminación, por lo que sería contradictorio, a su vez, con nuestros ideales de una sociedad igualitaria.
Entendemos nuestro trabajo como un ida y vuelta, donde en el día a día vamos dando la pelea al capitalismo a nivel ideológico, en el plano de los valores, recreando nuevas relaciones sociales, con igualdad y dignidad.
¿PARA QUÉ?
- Para liberarnos de nuestras condiciones de opresión, ya sean materiales o ideológicas.
- Para modificar las relaciones sociales.
- Para construir juntos herramientas, para analizar la realidad, criticarla y transformarla.
- Para contribuir al cambio social.
- Para crear nuevos lazos sociales que no se basen en el individualismo, en la opresión, en la competencia, sino en la cooperación y la confianza.
¿CÓMO?
A través del juego cooperativo, entendiéndolo como la herramienta de transformación de los vínculos y relaciones que establecemos con los niños y las niñas y los y las jóvenes. El juego como relación social está atravesado por relaciones de poder asimétricas y hegemónicas, que se imponen y reproducen el orden social. Las niñas y niños se relacionan jugando, juegan casi todo el tiempo y es aquí donde vemos estratégico construir nuevas formas de jugar que rompan con las relaciones de opresión, que nos den a conocer la existencia de valores como el compañerismo, la solidaridad, porque “no hay nadie que sepa todo y no hay nadie que no sepa nada”.
Además, consideramos necesaria nuestra participación en espacios como las asambleas de cada semana, ya que nos permite no sólo tener conocimientos sobre las distintas problemáticas sociales, sino también fortalecer los vínculos con los compañeros y las compañeras.
ALGO MÁS… SOBRE EDUCACIÓN POPULAR
La Educación Popular, en su praxis, es una filosofía de vida, de transformación social y personal, que nos desafía permanentemente a desandar aprendizajes, estructuras y subjetividades que hemos ido incorporando con la educación y el sentido común del sistema y el patriarcado. Al plantear poner el “cuerpo en juego”, abrimos la puerta a reconstruir todo lo que allí hemos alojado. El cuerpo es un lugar socialmente construido, es un terreno político, de allí que el poder necesite “normalizarlo”, educarlo, reglarlo, moralizarlo, el patriarcado no acepta que el cuerpo pueda ser un lugar de aprendizaje, de placer ni de conocimiento.
Un encuentro, un taller, un espacio de aprendizaje, es un lugar que habitualmente reproduce relaciones sociales, políticas, pedagógicas, culturales, que se dan hegemónicamente en la sociedad. En los encuentros de educación popular, intentamos que la lógica vincular, el lugar del cuerpo, de los sentimientos, del saber, respondan a una nueva lógica: la del hombre y la mujer nueva, la de la nueva sociedad que estamos construyendo, una lógica en construcción y dialéctica permanente.
Al jugarnos entramos en pugna con las matrices de aprendizaje adquiridas, con el sentido común, burgués y patriarcal, y la subjetividad que impone el mercado, la globalización, el miedo, la impunidad, el silencio y la quietud. Esta batalla cultural, esta construcción es una difícil tarea.
Hola, me llamo Alicia Horodyski, soy estudiante del Instituto Superior de Formación Docente y T. N 9 de La Plata, Debo realizar, para la materia campo de la practica (de primero)un trabajo sobre instituciones de educación popular. Se trata de llevar a cabo una entrevista con los miembros del mismo.
ResponderEliminarPido su consentimiento y de ser así me estaré acercando a la institución a la brevedad
Desde ya muchas gracias